30 abril 2007

En las tierras de MickeyMouse...

Aqui en Montreal, llegue a una casa que queda en el barrio portugues de la ciudad. La alquile por mi instinto, a traves de la desmagia de Internet, y diria que en algunos aspectos mi instinto me jugo una mala pasada. Comparto mis horas, entre otros, con unos compañeros de habitacion muy particulares.
Les cuento de ellos: No suelen vestirse de manera muy pomposa, mas bien, les gusta la desnudez. No son pesados, por lo pronto, su rapidez y el hecho que son extremadamente escurridizos los convertiria en especialistas en el juego de la escondida. No miden metros de altura, su tamaño no supera el centimetraje de una regla de nuestra cartuchera de la escuela primaria. Hacen trabajo de peon, pero son tan temidos como si jugaran a ser un alfil descubierto con todos los flancos diagonales de ataque. Roban dientes de leche a los niños pequeños y los mas apiolados no dejan ni un centavo, y lo peor del caso es que se enojan, cejijuntos, si no tienen queso parmesano. El roquefort no es de su preferencia.
Esta tarde eramos 4 intentando cumplir con la existencia de uno de ellos. Fue una carrera apresurada contra su fisico. Lo reconozco: Como buen valiente, me subi arriba de una silla, procurando tener alguna señal de su existencia. Mientras uno lo perseguia con la escoba, otro se escondia en la habitacion, una estaba sobre la mesa en cuatro patas, el muy pizcui andaba debajo del sofa, riendose de la inhabilidad de sus cohabitantes.
Por su propia confianza, el bigotudo quedo atrapado en las garras de un sweater. Como unico resquicio de salvacion, lo terminamos tirando por la ventana. El sweater salio volando... y pizcui tambien.
Al igual que su enemigo mas intimo, su caida no fue traicionera. Vivito y coleando, continuo su camino por el courtyard, buscando aromas fuertes para acompañar un tostado con jamon, y tal vez algun humano que lo lleve al salon de la fama y este con sus amigos, en el centro de Disneyworld.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es paradójico ver la aversión de que gozan los roedores en el mundo entero, y que Mickey Mouse justamente sea uno de ellos, y ni que decir del Maestro Splinter de las Tortugas Ninja,El ratón Perez, Súper Ratón, Speedy Gonzalez y otros famosos.

Buena suerte con tus nuevos amigos...

Anónimo dijo...

Solo ésto te faltaba vivir Maximiliano, adivino que de haber tenido una filmadora, hubieras realizado un film al estilo Steven Spielberg, galardonada con varios Oscar. Y es verddad que todos nos subimos sa una silla, cuando los señores Mickey Mouse aparecen ante nosotros. Repetite:"YO SOY MAS GRANDE", dicen que sirve de algo.