Tres deseos
-Te otorgo tres deseos...
-Con uno me alcanza...
-Dale, no seas piscuí...
-Estar en ese parque de Puerto Madero Este, pasando el dique creo 2. Sentir el pasto humedeciendo mi jean y meter las manos en la campera cuando cruza el viento. Escuchar en un reproductor de mp3 canciones de bandoneón.
-Concedido...
Sí. La única oportunidad donde aparece el Genio de la Lámpara la decide nuestro estado de ánimo. Quiloparió.
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4 comentarios:
huy que lindo! Un soñador pronto seremos mas... lindo esto de representar cuanta poesia hay en ese legendario puerto verdad? es una prosa en si mismo, lindo relato maxi.
Sí Natalia... a veces me planteo si hay más poesía unos metros más hacia Avenida Córdoba, en la terminal del Buquebús. Pero caminar por el puerto te aseguro que ayuda mucho a templar los ánimos (hasta debo decirte que cuando laburaba cerca, en algun banquito comía sanguchitos de miga, mientras adentro de los restaurants le daban al caviar).
Yo creo que soñadores hay, y por suerte, al reves que los nihilistas, no hay que financiarlos... ¿Que pensas?
¿Que pensas?
yo te otorgo sólo uno y no necesitarías nada más. creeme.
espero noticias!
Pou: Me preocupa sentirlo como un tiempo de descuento. Hoy fue cinta adhesiva en los labios.
Creo que necesito un miercoles de lluvia torrencial, un mojito o un mocaccino, trasladado a esas mesas del patio de comidas del Abasto que he dejado de frecuentar...
Desde los 6 años no me deprimian los domingos a la tarde. Me parece que debere considerar aprender japones o guitarra y salir de esta notebook de 14"1. Solo los domingos.
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